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Enrique Ochoa Reza como Gabino Barreda

Ni las nutridas y frecuentes manifestaciones a las puertas del PRI nacional con un escándalo que no dejarían dormir a un muerto en camposanto, ni las demandas más lógicas, ni los mandatos de la corte, ni el fin de los tiempos del partido que en sus mejores momentos pintó de tricolor toda la república hacen entrar en razón a la cúpula que no la cabeza de dicho partido.

Pareciera que hasta ese edificio sólo llegan secretarias, asistentes y gente de resguardo que vienen a realizar su trabajo lo mejor posible, sin dejar de mencionar al personal de limpieza, los presidentes, secretarios, subsecretarios, coordinadores y etc, etc, como cosa de casualidad cuando estos eventos se están realizando nunca están o están por llegar evitando de este modo dar la cara a quienes se manifiestan a sus puertas.

Así sucedió la mañana de hoy cuando a las puertas del partido llegó un buen grupo de militantes exigiendo hablar con la dirigencia del partido –que nunca los ha atendido-y a los que les ofrecieron hablar con el asesor del sub secretario de algo, o con el secretario del asesor del subsecretario que con todo respeto es gente que no tiene decisión sobre el destino del partido, destino que dicho sea de paso está detenido con consejos políticos amañados, presidencias  sempiternas, de regalo, de compromiso o de ya no me importa quien este porque esos a los que no les interesa están en el mismo caso.

Cerca de unos mil militantes encabezados por Sergio Jiménez Barrios ex legislador pidieron nuevamente que se respete al partido y las instituciones pues a pesar de haber orden del tribunal pidiendo que se lance convocatoria para elegir Presidente del partido en la capital del país, Enrique Ochoa Reza actual Presidente del PRI nacional ni ve, ni escucha, ni le preocupa la opinión de los que respaldaron la XXII asamblea nacional del partido a saber los militantes, a quienes nunca ha recibido y con quienes se sigue jugando al enviar a cualquiera que este mal sentado o aburrido a hablar que no acordar con ellos cuando se presentan a inconformarse.

Las bases que se traducen en electores, se manifiestan por una renovación del partido que ha caído hasta el sexto lugar de preferencia esto es por debajo de los candidatos independientes, pidiendo ser escuchados por quien en realidad puedan resolver sus peticiones, piden además que se baje ya del columpio Mariana Moguel actual pero no por eso legítima presidenta del PRI en la CDMX y que respetuosamente se sume a los cambios que necesita el partido, que personajes tan nefastos como Cuauhtémoc  Gutiérrez de la Torre deje que conducir los destinos del país y que este partido recupere su verdadera representatividad que está en las calles, en sus militantes y votantes dejando de hacer el ridículo con eventos de gran pantalla como la XXII asamblea Nacional del PRI.

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