Por: Lorena Osornio E.
Diversos países del mundo han puesto sus ojos sobre Corea del Sur y Japón, dos países vecinos de China, considerado el epicentro del nuevo coronavirus (Covid-19), debido a su baja tasa de contagios y número de muertes.
Esta semana Corea del Sur registró 9,037 casos positivos y 124 muertes, mientras Japón suma 1,193 casos positivos y 43 víctimas mortales. Cabe destacar que hasta hace unas horas, el país nipón se había reusado a emitir una cuarentena obligatoria.
¿Qué han hecho diferente Corea del Sur y Japón al resto de los países? Al parecer, algunos expertos creen que la clave está en la rápida detección de casos. Pues si bien el resto de su ciudadanía no se ha mantenido aislada, las autoridades sanitarias sí han confinado a los positivos para su pronto tratamiento.
Expertos consideran que “la única forma de enfrentar a cualquier pandemia es hacer tests y aislar. Y muchos países no han escuchado”, sin embargo, también advirtieron sobre que las pruebas realizadas por el país, no eran suficientes para detectar los casos de personas asintomáticas.
Por su parte, Corea del Sur mantiene un estricto control militar en su país, siendo estos elementos activos (un total de 3,100 soldados) quienes están encargados de desinfectar las calles y cuidar que los ciudadanos cumplan las normas sanitarias. También tiene trabajando activamente a 450 trabajadores médicos.
Hace unos días, la agencia de noticias surcoreana Yonhap anunció que varios países de Latinoamérica, Europa y Medio Oriente, estaban interesados en saber cuáles han sido sus medidas para prevenir el contagio del Covid-19.
Por ahora, la pandemia está contenida en México, y si bien la decisión de no hacer cuarentena obligatoria no parece mala idea basados en las experiencias orientales, es un hecho que no hay la capacidad de detectar casos positivos a tiempo, lo que a la larga podría hacer grave el porcentaje de contagios. Sumada a la estrategia de hacer una carrera de pandemia larga, lo que podría generar una posible inactividad económica parcial, lo que significará posible daños en la economía de los ciudadanos.
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